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Protesta contra el monumento que altera los hechos historicos
Este
monumento fue encargado por el gobierno húngaro (o, más
precisamente, por el primer ministro Viktor Orbán, con poderes casi
ilimitados) y erigido sigilosamente, tras numerosos retrasos, en la
madrugada del 20 de julio de 2014En
el borde de la acera frente al monumento se pueden ver guijarros,
objetos personales, fotografías, libros y documentos
conmemorativos.
El
título original de la obra - "Ocupación
alemana de Hungría, 19 de marzo, 1944.
- se ve por el lado derecho. En el centro del monumento se encuentra
el arcángel Gabriel con el cetro, levantando su brazo hacia el
águila imperial, que representa Alemania. El gobierno actual de
Hungría, encabezado por Viktor Orbán, deseaba que Gabriel
representara la
inocencia de Hungría en el curso de la 2a. guerra mundial.
Sin
embargo, es un hecho histórico, que en Hungría durante el gobierno
de Miklós Horthy a partir de los 1920 se aprobaron una serie de
leyes que gradualmente aminoraron los derechos de ciertos sectores
sociales. Luego Hungría se aliaba con la Alemania nazi y participó
en la 2a. guerra mundial junto con las Potencias del Eje.
La invasión de las tropas alemanes no se encontró con resistencia. La administración húngara sobrepasó las demandas alemanas, organizó y realizó con mucha eficiencia las deportaciones, que culminaron en 600 mil víctimas. El nombre de este monumento es falso: los centenares de miles de víctimas fatales no eran "víctimas de la invasión alemana", esta formulación ignora y niega la participación húngara en la aniquilación de sus propios ciudadanos. La erección de este monumento es un intento por el gobierno actual, y su partido dominante, el Fidesz para falsificar la historia, y aminorar el rol de Hungrian en el Holocausto. A su vez, las condiciones de su construcción, y su mensaje falso lo convirtieron en el símbolo de la arrogancia gubernamental, y de la propensión al poderío exclusivo.
La protesta contra el monumento, y la falsificación de la historia representada por él está en curso desde el enero de 2014. Los organizadores como ciudadanos húngaros y europeos responsables mantienen las demostraciones por el diálogo social, el alumbramiento sincero del pasado, y por la eliminación de este monumento falsario y engañoso de la plaza de la Libertad.